En general la mayor parte de los pacientes mejoran con los antiinflamatorios no esteroideos; en otras ocasiones el cambio de hábitos de sedestación con el uso de soportes (flotadores) puede ser también util.
La fisioterapia tiene también cierta utilidad, y algunos autores propugnan la realizacion de manipulaciones del coccix por via anal.
Las infiltraciones son un elemento importante tanto del punto de vista terapéutico como diagnóstico, al ayudar a descartar otro tipo de patologias. Las infiltraciones se pueden realizar pericoccigeas o a nivel de la articulación sacrococcigea. Algunos autores preconizan la infiltracion del ganglio "impar" o de Walter que es el responsable de recoger la inervacion de la zona. Esta estructura seria para diferentes especialistas del dolor pelvio inespecifico. En esta linea también puede ser eficaz el tratamiento mediante ablación por radiofrecuencia del ganglio.
En casos rebeldes se puede realizar una extirpación del coccix o coccigectomia, la cual ha demostrado ser altamente eficaz en pacientes con dolor intratable por otros medios. El mayor problema asociado a la intervención es la posibilidad de infección debido a la proximidad de la zona con el ano.
La recuperación después de la resección del coccix es rápida, debiendo restringir ligeramente la presión sobre la zona. Es necesario además extremar las medidas de limpieza a nivel de la herida quirúrgica.
El sintoma princeps de la coccigodinia es el dolor en la region coccgea. Este puede aparecer sobre todo en relacion con asientos duros, aunque en ocasiones también en sitios duros, e incluso con la bipedestación.
En ocasiones aparece también sensación acompañante de quemazón perianal o iincluso dolor pelvico inespecifico.
El diagnóstico se efectua mediante la exploración clinica que básicamente consiste en la palpación dolorosa del coccix. En cualquier caso es necesario descartar patologia a nivel lumbar y abdominal.
Los estudios complementarios mediante radiologia simple pueden mostrar una inestabilidad sacrococcigea o intercoccigea con los cambios de posicion (bipedestación-sentado). Es imprescindible descartar también tumores de la región sacra, como el cordoma, para lo que es necesario la realización estudios de imagen como la RMN.